EDITORIAL SEPTIEMBRE  2014 

La generación sin abuelos

Por Angélica Montenegro
Terapeuta ocupacional
Hospital Clínico de la Universidad de Chile
Socia adjunta SONEPSYN

Aun tras largos años ya de su partida,  todavía recuerdo a una viejecita de pelo cano quien me adiestró paciente pero tenazmente en la trama de los palillos y el crochet. También con frecuencia irrumpe en mi memoria, su ingente sabiduría que se expresaba en una multitud de dichos populares. A cada situación cotidiana, acudía uno de ellos: " Mas vale arrear que llevar la carga m' hijita"," Quien guarda para el otro día en Dios desconfía"...

En la actualidad, estamos asistiendo a un curioso proceso de postergación de las etapas del ciclo vital. La sociología lo ha denominado " Moratoria Psicosocial”. Esta demora que parece tener su génesis en la adolescencia, impacta las etapas sucesivas las que obligadamente se van ralentizando .Hoy en día, el joven una vez egresado de la Educación Superior a la que se ha ido teniendo cada vez mas acceso, se siente impelido a continuar su formación para homologarse a sus pares y poder optar a mejores niveles de ingresos. Por otra parte, esta decisión influye también en la vida afectiva por lo cual se ha ido retrasando tanto la nupcialidad como la natalidad ; en consecuencia la madre primigesta se sitúa en la década de los 30 con el riesgo que ello conlleva ,limitando la edad fértil con lo que la prole se ve severamente mermada. Estas condiciones, redundan en que será cada vez menos probable que la generación de nietos cuente con abuelos como referentes. Aquel abuelo que acompañaba a elevar el volantín o la abuela a la que se acompañaba a preparar la mermelada ya  definitivamente no son figuras preeminentes. Este proceso también ha obligado de alguna forma a los abuelos a intentar no " parecer " abuelos. En una cultura donde se privilegia la juventud y donde cada vez se es mas proclive a la longevidad, el abuelo de antaño parece no tener espacio.

He propuesto un ultimo Dilema a resolver de acuerdo a los propuestos por Erickson , y lo he denominado " Legitimidad v/s Anonimato". El abuelo que intenta legitimarse accediendo a los medios tecnológicos incluso para establecer contacto vía red social con sus nietos, o de realizar practica deportiva diaria. En el otro sentido, se situaría aquél que por desconocimiento o falta de interés, permanece en la " esencialidad" lo cual conduce a escotomizarlo o no ser visto.

Aquella viejecita de pelo cano fue fundamental en mi formación, en la entrega de valores, en la quieta compañía sin más ambición que el estar acompañadas, en la perpetuación de recetas culinarias, en el consejo sabio y oportuno.

A mi juicio, uno y otro deben ser rescatados y por el beneficio que representa para las generaciones futuras, otorgarles el espacio  de valor que se merecen.

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